En el día de ayer, fue asesinado Alfonso Cano, el líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) junto a otros combatientes, en el departamento del Cauca (suroccidente del país).
El líder de las FARC siempre sostuvo la disposición de la organización a encontrar una solución política al conflicto armado que vive Colombia desde hace más de 50 años.
Como prueba de ello, las FARC venían liberando de manera unilateral y voluntaria a sus retenidos.El estado colombiano busca llegar a la paz mediante los bombazos, que son las recetas de Obama y de Santos. Eso no conduce a ningún lado más que a sembrar más guerras.
En agosto pasado, Cano recordó al presidente Juan Manuel Santos que “en su discurso de posesión, prometió dejar atrás los odios que habían caracterizado los ocho años del anterior Gobierno (2002-2010). Esa promesa la olvidó".
Asesinando a los líderes revolucionarios no se logrará nunca la paz. Tampoco tratando a los revolucionarios como delincuentes y pretendiendo despojarlos de su carácter político. Las FARC-EP representan el conflicto político y social colombiano desde hace mas de 40 años.
Santos, quien dice que quiere la paz, pero amenaza con que si la guerrilla revolucionaria no se entrega, depone las armas y deja de luchar, "todos terminarán en la cárcel o en la tumba". Eso es Santos. Eso es el Ejército Comlombiano. Eso es el Plan de Seguridad Democrática que lleva años en el hermano país de Colombia, años sembrando más violencia. Porque en Colombia existe el terrorismo de Estado, impregnado de los conceptos de Seguridad Nacional.
El asesinato de Cano pretende desmoralizar a los combatientes revolucionarios colombianos y de toda Nuestramérica. La tecnología y los recursos norteamericanos con sus satélites, sus armas, sus herramientas y tacticas es muy grande. Pero Alfonso Cano no es las FARC-EP. Y ninguna lucha es llevada adelante por un sólo hombre (bien lo deben saber). Son los pueblos, son cientos de miles los que construyen una Revolución. Con su asesinato no terminan con las FARC, ni mucho menos resuelven la injusticia, la desigualdad, la entrega en la que sumergen a este pueblo.
Los combatientes mueren en combate. Honramos su historia y su lucha, la consecuencia política y un espíritu revolucionario, consecuente con su heroica batalla.
Los rebeldes revolucionarios no han sido vencidos. Mientras haya un pueblo sojuzgado, la heróica lucha de los caídos sera un ejemplo para la liberacion.
ALFONSO CANO PRESENTE!
UNIDAD Y LUCHA CONTRA EL IMPERIALISMO
PATRIA O MUERTE
VENCEREMOS
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